Técnica, sentimiento y perfección para un espectáculo deslumbrante donde el movimiento y la música logran embrujarnos y conmovernos.
María Carrasco y diez artistas en escena entre músicos y bailarines. La hora y media de duración de Embrujo se convierte en una exposición de siglos de Historia en la que el arte y la cultura española son los protagonistas.
Un homenaje a nuestros sentimientos más poderosos; nuestros miedos, nuestras dudas, nuestras pasiones, nuestras añoranzas. Con una música que describe los paisajes eternos de nuestros sentimientos, unos bailarines que nos traen la fuerza de un arte vivo como es el flamenco y una gran bailarina María Carrasco; a veces delicada y otras enfurecida, pero siempre imaginativa en su flamenco.
Embrujo pretende sobre todo llegar a los sentimientos del espectador acercándole a un flamenco actual, pero sin perder su esencia. Mimado en su puesta en escena hasta el último detalle.
Llorará, recordará, aplaudirá, su alma danzará con nosotros.
Escenario con hombros y dimensiones mínimas de 8x5x4.
Suelo liso, que no resbale para zapatear.
