En clave de humor y de celebración, dos acróbatas se embarcan en un viaje de transformación personal.
Poco a poco, estos cambios se traducen en una alteración del espacio escénico que da lugar a su reconstrucción individual. Los personajes de Lucas y Max se articulan en un (des)montaje de contraposiciones y (des)encuentros.
El uno, motivado por un afán de superación constante y, el otro, por la búsqueda de conformidad, estabilidad y equilibrio. Estas dos inercias desencadenan una serie de situaciones extrañantes a la vez que poéticas a raíz de sus crisis de edad.
Espectáculo para todo ideal para todo tipo de público.
Espacio de, al menos, 12 m. de anchura x 12 m. de profundidad x 7 m. de altura despejados.